Salir del bloqueo escritor

Hoy hablo del (odioso) bloqueo escritor. Alguno habrá escuchado del bloqueo lector, ese momento en el que no sabes qué leer o ni siquiera te apetece estar a menos de medio metro de un libro... Pero no, esto es otra cosa. Igual de mala, la verdad. Aunque de todo se sale, ¿no?

Sé de escritores que se sientan a escribir y son como máquinas en una fábrica. Y hay otros que no son capaces ni de terminar de escribir un libro. Pues... bueno, vengo a admitir que yo me encuentro en el medio de estos dos grupos. Si lo extrapolamos a la sociedad sería como la clase media, supongo.

Todo va genial hasta que se te quitan las ganas de escribir o te quedas pillada en un punto y no sabes qué maldito camino seguir. ¿Mato a todos los personajes y dejo la novela así? ¿Hago que caiga un maldito meteorito en la Tierra y así dejan ya de preocuparse por tonterías? Sí, la verdad es que suenan a ideas originales. Pero... esto es lo que yo hago:

1. Ver mi carpeta de fotos de la novela en Pinterest. Aquí tenéis el mío: https://es.pinterest.com/marinacarab/

2. Escuchar música de artistas que no conozco y que pueden mostrarme (de forma milagrosa) el camino a seguir o darme alguna idea sobre una escena que puede ocurrir incluso al final de la novela (algo es algo).

3. Ver películas y series, y si tienen que ver con la novela, mejor que mejor.

4. Seguir con otra novela o comenzar una nueva. Si tengo algo que sé que quiero escribir, es mejor que lo comience cuanto antes. Obsesionarse con una sola novela puede hacer que dejes atrás otras muchas oportunidades sugeridas por tu cerebro.

5. (Y más desesperado de todos) Dejar que pase el tiempo. Sí, a veces lo mejor es esperar y que las cosas lleguen solas. Forzarme a escribir no suele salir nada bien. Escribo porque quiero, no porque debo.

Curiosidad: «Cayendo en la tentación» fue una novela que dejé a medias durante bastante tiempo (por culpa del bloqueo escritor) y que después logré terminar.